domingo, 14 de abril de 2013

COMO VIVIR LA VIDA CRISTIANA



COMO DEBE VIVIRSE LA VIDA CRISTIANA
Colosenses 3:1-25
1. Vida demandada, con relación a Cristo:
Versículos del 1 al 8, La base para un andar celestial, es el hecho de la unión con Cristo en la resurrección espiritual, (nacer de nuevo). Nuestra unión es espiritual, de ahí que nuestro andar o modo de vida, ha de ser también celestial.
Debemos quitar de nosotros toda práctica de maldad e inmoralidad. Luego podremos encomendarnos a nosotros mismos lo que Cristo enseña. Pablo apelaba al compromiso hecho por los creyentes y los instaba a permanecer fieles a su confesión de fe. Debían despojarse de la vieja vida y revestirse de la nueva forma de vivir que Cristo les daba y dejarse guiar por el Espíritu Santo.
Buscar las cosas de arriba: Significa luchar por poner las prioridades celestiales en la práctica diaria. Preferir lo eternal antes que lo temporal. Filipenses 4:8.
Poner la mira en las cosas de arriba: Significa mirar la vida desde la perspectiva de Dios y hacer lo que a Él le agrada. Obtenemos la perspectiva apropiada de los bienes materiales cuando los vemos de la misma manera en que Dios los ve. Cuanto más consideremos al mundo a nuestro alrededor de la manera en que Dios lo hace, tanto más viviremos en armonía con Él. No debemos apegarnos demasiado a aquello que es solo temporal. (I Timoteo 6:6-11)

2. Vida demandada, con relación a la Iglesia:
Versículos del 9 al 17 Con respeto a la Iglesia cristiana, no debemos tener barreras de nacionalidad, raza, educación, nivel social, riqueza, sexo y poder. Cristo derribó todas las barreras y acepta a toda persona que viene a Él. Nada debe de impedir que hablemos de Cristo o que aceptemos a alguien en nuestra iglesia (Efesios 2.14, 15).
Los cristianos deberíamos de abocarnos a la tarea de construir puentes y no muros, puesto que somos miembros de la familia de Dios y partes del mismo Cuerpo. Por eso el apóstol Pablo recomienda en la carta a los Efesios en el capitulo 4:3-6
Debemos de recordar que Dios ha dado a su Iglesia una enorme responsabilidad: hacer discípulos en todas las naciones (Mateo 28.18–20).
Esto Involucra predicar, enseñar, sanar, nutrir, dar, administrar, edificar y muchas tareas más. Si tuviéramos que cumplir este mandato como individuos, podríamos rendirnos aun antes de intentarlo, sería tarea imposible.
La Biblia nos ofrece una estrategia para ayudarnos a vivir para Dios cada día:
·         imitar el espíritu perdonador y misericordioso de Cristo (3.12, 13);
·         dejar que el amor guíe nuestra vida (3.14);
·         permitir que la paz de Cristo gobierne nuestro corazón (3.15);
·         ser siempre agradecidos (3.15);
·         tomar en cuenta la Palabra de Dios siempre (3.16);
·         vivir como representantes de Cristo (3.17).

Por otro lado, todo cristiano debe de llenarse de la Santa Palabra del Señor, para que estemos bien instruidos en la doctrina de Cristo, lo cual proviene de un constante estudio de ella. Y además, para edificar a los hermanos de la iglesia, con los cuales tenemos comunión constante. (I Tesalonicenses 5:11).

3. Vida demandada, con relación a la familia:
Versículos del 18 al 21, Las esposas tienen que actuar sobre la base de dos principios:
1) Sumisión a sus esposos (Génesis 3:16), y
2) Lo adecuado y decoroso en el Señor (Efesios 5:22; y I de Pedro 3:1)

Con respecto a los maridos, podemos contemplar el amor de Cristo por la Iglesia. Y debido a ese ejemplo los maridos debemos de estar dispuestos a pagar un precio, aún a morir por nuestras esposas. Vemos pues, que la autoridad del hombre sobre la mujer se funda en su amor, amor que debe ser tal que lo lleve aún a arriesgar su vida por ella.

En el asunto de la relación de los hijos y padres el Apóstol da recomendaciones al respecto.
Obedecer a los padres, no sólo es correcto sino justo, pues Dios lo ordena en sus mandamientos, por lo tanto es un deber que El nunca excusará.
En Éxodo 20:12 no solo encontramos que es el primer mandamiento con promesa,
Con referencia a los Padres, se aconseja criar a sus hijos en la disciplina y amonestación del Señor. También se recomienda no provocarlos a ira, es decir no tratarlos cruelmente ya que con esto, no solo se conseguirá endurecerlos sino que se desesperen en sus pecados.

La disciplina y amonestación de los padres hacia los hijos, incluye la instrucción. La mente debe ser alimentada con disciplinas e instrucción sanas, así como el cuerpo lo es con el alimento adecuado. Por lo tanto, los padres deben de transmitir todo conocimiento que es propio para los niños, inclusive principios y reglas elementales de conducta.

4. Vida demandada, con relación al trabajo:
Versículos del 22 al 25 así:

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Su opinión es importante para nosotros, por favor, háganosla saber