domingo, 24 de noviembre de 2013

REFLEXION: PARA QUE ES LA VIDA

AMOS 6:4-7 – PORQUÉ SE ESFUERZA TANTO LA GENTE?
En muchos países, nuestra generación está pasando a nuestros nietos naciones endeudadas y con grandes problemas. Pensamos en el mundo en el cual ellos vivirán. Observando lo que sucede en la actualidad habría que concluir que el futuro tendrá días difíciles para la supervivencia. Cuáles fueron los pecados que destruían a una nación? El primero fue mencionado en el versículo 4, que dice lo siguiente:
"Duermen en camas de marfil y reposan sobre sus lechos; comen los corderos del rebaño y los novillos sacados del establo"
Aquí en realidad se mencionaron dos pecados: el sexo ilícito y la glotonería, pecados de la naturaleza humana.
Continuemos leyendo en el versículo 5 de este sexto capítulo, donde se mencionó el segundo pecado nacional de aquel pueblo:
"Gorjean al son de la flauta e inventan instrumentos musicales, como David"
El auge de la música no ha sido la característica exclusiva de una época en particular. La creatividad en este arte ya operaba en aquellos días. Pero la música no era utilizada como lo había sido en los tiempos de David. El rey David era un genio cuya música fue creada para dar alabanza y honra a la gloria de Dios. En cambio, en un ambiente de idolatría, de adoración a ídolos, la música era una influencia para que la gente se continuara apartando de Dios y de la adoración a Dios.
Ahora el texto nos lleva al tercer pecado de ámbito nacional de aquel pueblo. Leamos el versículo 6 de este sexto capítulo del libro de Amós:
"Beben vino en tazones y se ungen con los perfumes más preciosos, pero no se afligen por la ruina de José."
Aquí se aclaró que bebían vino en tazones, no en vasos normales. Por la forma en que los describe aquí, se estaba hablando de alcohólicos.
También se añadió que se perfumaban con las esencias más finas y el profeta además aclaró pero no se afligen por la ruina de José, lo que estaba contribuyendo a destruir la nación era la embriaguez.
Realmente el elevado consumo de alcohol y de drogas, así como los otros pecados mencionados anteriormente, son todos ellos, factores decisivos para la destrucción de una sociedad.
Los pecados cometidos por la influencia de las pasiones humanas han provocado la descomposición de la sociedad, afectando a su misma estructura y desarrollo, alterando gravemente la convivencia entre las personas, el respeto a los valores morales mínimos, y promoviendo conductas de desobediencia a las leyes.
El mensaje del profeta Amós se hizo realidad, y se cumplió en su tiempo. El reino de Israel o del norte fue destruido y conducido al cautiverio.
En el versículo 4 vimos que entre los pecados de los israelitas se especificaron la glotonería y el sexo ilícito.
En el versículo 6 se enfatizó que la situación de desenfreno se expresó en la música, cuya práctica estaba influenciada por el paganismo, es decir, por la idolatría que había llevado a aquel pueblo a la adoración de los ídolos, y que servía como marco para la práctica de los pecados que hemos mencionado.
Era una filosofía de vida que se expresó muy bien en aquel antiguo lema, que decía "comamos y bebamos, que mañana moriremos".
Todo esto que estamos diciendo pone de relieve una realidad innegable e ineludible sobre el corazón humano, es decir, sobre el centro de nuestra vida emotiva y emocional. Uno podría apropiarse de todo el mundo, de todas las riquezas y recursos, de todo el poder disponible, de todos los placeres, de todos los honores, afectos y adhesión de las personas y aún así, permanecería insatisfecho. ¿No es cierto que esta conclusión resulta interesante y merece una reflexión? Los escritores de la Biblia no eludieron este problema. El rey Salomón, que ciertamente exploró la ciencia y la sabiduría de su tiempo en la búsqueda de la plenitud de la experiencia humana. Llegó entonces a conclusiones similares a las de las personas de nuestro tiempo.
En el libro de los Proverbios, capítulo 27, versículo 20 encontramos estas reflexiones: La muerte, el sepulcro y la codicia del hombre jamás quedarán satisfechos. Y en el libro del Eclesiastés, capítulo 1, versículo 8; Todas las cosas hastían más de lo que es posible expresar. Ni se sacian los ojos de ver, ni se hartan los oídos de oíros.
En Santiago capítulo 4, versículo 2: Codiciáis y no tenéis; matáis y ardéis de envidia y nada podéis alcanzar; combatís y lucháis, pero no tenéis lo que deseáis, porque no pedís.
El problema, estimado hermano, es que se está buscando la satisfacción, el pasarlo bien, en cualquier cosa, en cualquier factor o circunstancia humana que no sea Dios. Y, en consecuencia, el resultado es siempre el mismo: Vacío interior, frustración, desilusión, amargura y frustración.
Y la respuesta viene desde la Biblia. En el Antiguo Testamento, el Salmo 1 nos responde que la experiencia de la persona que nutre su vida con la Palabra de Dios, se resume en las siguientes palabras: Será como un árbol firmemente plantado junto a corrientes de aguas, que da su fruto en su tiempo y su hoja no se marchita; en todo lo que hace, prosperará. Pero el salmista también advierte: "En cambio, los malvados son como la paja arrastrada por el viento".
CONCLUSIÓN
Estimado hermano, le invitamos a preguntarse: ¿a cuál de estos dos vidas se parece la mía? Porque en el Nuevo Testamento, el mismo Señor Jesucristo, refiriéndose a todas las cosas en las que el ser humano deposita su ansiedad y por las cuales lucha, dijo: Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas (Mateo 6:32). Y más adelante, como podemos leer en Juan 6:53) dijo, El que en mí cree, tiene vida eterna. Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno come de este pan, vivirá para siempre. Como el vino a morir, resucitar y hacer posible que por la fe recibamos la vida eterna, a la vez que vivamos una vida de calidad humana y espiritual, también dijo: He venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia (Juan 10:10).
Y aquí, estimado oyente, vamos a detenernos por hoy. Pero antes, le sugerimos leer todo este capítulo 6 de Amós, para que pueda estar mejor preparado para nuestro próximo estudio.


domingo, 17 de noviembre de 2013

HAY VIDA DESPUES DE LA MUERTE

HAY VIDA DESPUES DE LA MUERTE
1 Juan 5:7-13 En cristo tenemos vida eterna
Lc. 16:31 "Si no oyen a Moisés y a los profetas (si no creen lo que dice las Sagradas Escrituras), tampoco se persuadirán aunque alguno se levantare de los muertos".
Resurrección de Lázaro
Jn.12:2 "Y le hicieron allí una cena; Marta servía, y Lázaro era uno de los que estaban sentados a la mesa con él".
Mt. 27:52-53 "y se abrieron los sepulcros, y muchos cuerpos de santos que habían dormido, se levantaron; y saliendo de los sepulcros, después de la resurrección de él, vinieron a la santa ciudad, y aparecieron a muchos".
Esto es lo que Jesús enseñó y en consecuencia nosotros los cristianos creemos: Lc. 16:22-23 "Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos".
La muerte es únicamente la separación de nuestro "yo" (el alma) del cuerpo físico. Nuestro cuerpo va al cementerio, pero nuestra alma parte a la eternidad inmediatamente en plena conciencia de nuestra nueva condición. Si somos creyentes, nacidos de nuevo por la gracia de Dios, entramos a la presencia del Señor.
El apóstol Pablo creía firmemente esta realidad, Filp. 1:21-23 "Porque para mí el vivir es Cristo, y el morir es ganancia… deseo de partir y estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor". Su gran esperanza era que al morir partía para estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor que la vida presente.
Rm. 8:16-17 "El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo".
No existe nada más glorioso que tener la absoluta seguridad que al morir partimos para estar con Cristo, lo cual es muchísimo mejor. El Señor dijo que al morir Lázaro, fue llevado por los ángeles a la morada celestial.
Los incrédulos e indiferentes no tendrán que esperar un día del juicio para escuchar su veredicto, porque la sentencia ya ha sido pronunciada por Dios. Jn. 3:18 "El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios".
Ap. 6:9-11 Cuando abrió el quinto sello, vi bajo el altar las almas de los que habían sido muertos por causa de la palabra de Dios y por el testimonio que tenían. 10 Y clamaban a gran voz, diciendo: ¿Hasta cuándo, Señor, santo y verdadero, no juzgas y vengas nuestra sangre en los que moran en la tierra? 11 Y se les dieron vestiduras blancas, y se les dijo que descansasen todavía un poco de tiempo, hasta que se completara el número de sus consiervos y sus hermanos, que también habían de ser muertos como ellos.
Ap:7-9-17 Después de esto miré, y he aquí una gran multitud, la cual nadie podía contar, de todas naciones y tribus y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con palmas en las manos; 10 y clamaban a gran voz, diciendo: La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero. 11 Y todos los ángeles estaban en pie alrededor del trono, y de los ancianos y de los cuatro seres vivientes; y se postraron sobre sus rostros delante del trono, y adoraron a Dios, 12 diciendo: Amén. La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén. 13 Entonces uno de los ancianos habló, diciéndome: Estos que están vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de dónde han venido? 14 Yo le dije: Señor, tú lo sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.

domingo, 10 de noviembre de 2013

LA DOCTRINA BIBLICA DEL INFIERNO



¿Es el Infierno un Tormento Eterno Consciente?

Existen algunos grupos de cristianos y muchos cultos que niegan la idea de que el infierno, en sentido general, significa eterno castigo consciente. Algunos sostienen que el eterno castigo de Dios es la aniquilación o la no existencia del infierno. Otros dicen que es temporal y que eventualmente, todos serán salvos del infierno.
Tal vez la objeción más común es la de que un Dios amoroso nunca castigaría a las personas atormentándolas eternamente.
Estamos de acuerdo en que Dios es amor (1 Jn 4:8), pero Él es también justo (Neh 9:32-33; 2 Ts 1:6) y eterno (Sal 90:2; 1 Ti 1:17). Dios castiga al hacedor de maldad (Is 11:13) y este castigo será eterno. Pero la pregunta permanece.

¿Es éste un lugar de tormento consciente o no?
Existen versículos que pueden ser interpretados para sostener la idea de que los muertos no están conscientes: Eclesiastés 9:5: “…pero los muertos nada saben,…”4 y Salmo 146:4: “…En ese mismo día perecen sus pensamientos.” Estos son buenos ejemplos. Otros versículos comparan a los muertos con el dormir: Hechos 13:36; 1ª Corintios 15:1-6; 1ª Tesalonicenses 4:13; pero estos últimos versículos escasamente comparan la similitud entre la apariencia de los muertos y la apariencia de alguien durmiendo.

Los Muertos están Conscientes Después de la Muerte

Los malvados descienden vivos al Sheol
Números 16:30, 33: “Mas si el Señor hiciere algo nuevo, y la tierra abriere su boca y los tragare con todas sus cosas, y descendieren vivos al Seol, entonces conoceréis que estos hombres irritaron al Señor…33 Y ellos, con todo lo que tenían, descendieron vivos al Seol, y los cubrió la tierra, y perecieron de en medio de la congregación.”

Lanzados a la oscuridad externa con llanto y crujir de dientes
Mateo 8:12: “mas los hijos del reino serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes.”

Aquellos echados al fuego sufrirán conscientemente
Mateo 13:41-42: “Enviará el Hijo del Hombre a sus ángeles, y recogerán de su reino a todos los que sirven de tropiezo, y a los que hacen iniquidad, 42 y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.” Mateo 13:50. y los echarán en el horno de fuego; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Echados a un fuego tormentoso
Apocalipsis 14:9-11: “Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, 10 él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; 11 y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre.” Apocalipsis 21:8. Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda
El infierno es un lugar de fuego eterno y castigo

Fuego inextinguible
Mateo 3:12: “Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagará.”

Infierno de fuego
Mateo 5:22: “…y cualquiera que le diga: Fatuo; quedará expuesto al infierno de fuego.” Mateo 5:29, 30. Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno. 30 Y si tu mano derecha te es ocasión de caer, córtala, y échala de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.

Infierno ardiente
Mateo 18:8-9: “Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno. 9 Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego.”

Fuego Eterno
Mateo 25:41: “”Entonces dirá también a los de la izquierda: ‘Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.’”
Judas 7: “como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno.”

Castigo Eterno
Mateo 25:46: “E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.”

La palabra “eterna(o)” en ambos lugares es “aionios” que significa:
1) Sin principio y fin: lo que siempre ha sido y siempre será;
2) Sin principio;
3) Sin final, nunca cesará, será eterno. La palabra “castigo” es la palabra “kolasis” y esta significa “castigar, con la implicación que resulta en severo sufrimiento; castigar, castigo.” 

Lago de Fuego
Apocalipsis 20:15: “Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.”

sábado, 7 de septiembre de 2013

31 VIRTUDES PARA LA ORACION



TREINTA Y UN VIRTUDES PARA LA ORACION
1.       Salvación. Señor, que tu amor se manifieste en mi vida para que obtenga la salvación que es en Cristo Jesús.
2Timoteo 2:10 Por tanto, todo lo soporto por amor de los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que es en Cristo Jesús con gloria eterna.
2. Crecimiento en Gracia. Padre, ayúdame a crecer en el conocimiento y la gracia de nuestro Señor Jesucristo.
2Pedro 3:18 Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A él sea gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén.
3. Amor. Concédeme vivir una vida de amor, lleno del Espíritu Santo.
Gálatas 5:25 Si vivimos por el Espíritu, andemos también por el Espíritu.
Efesios 5:2 Y andad en amor, como también Cristo nos amó, y se entregó a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios en olor fragante.
4. Honestidad e Integridad. Padre, que la integridad y la Honestidad sea la protección de mi vida.
    Salmos 25:21 Integridad y rectitud me guarden, Porque en ti he esperado.
5. Dominio Propio, ayúdame a ser alerta y tener dominio propio en todo lo que haga.
    1Tesalonicenses 5:6 Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
6. Amor por la Palabra de Dios. Señor, quiero aprender que Tu Palabra es más preciosa que el oro y más dulce que la miel.
Salmos 19:7 La ley del Señor es perfecta, que convierte el alma; El testimonio del Señor es fiel, que hace sabio al sencillo. ...Deseables son más que el oro, y más que mucho oro afinado; Y dulces más que miel, y que la que destila del panal.
7. Justicia. Dios, ayúdame a amar la justicia para que actúen justamente en todo lo que hagan.
Miqueas 6:8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide el Señor de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios.
8. Misericordia. Señor, quiero ser misericordioso con los demás, como tu eres Padre de Misericordia.
Lucas 6:36 Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso.
9. Respeto (a si mismos, a otros, y a las autoridades) Padre, concédeme tratar a los demás con el respeto que tu Palabra demanda.
1Pedro 2:17 Honrad a todos. Amad a los hermanos. Temed a Dios. Honrad al rey.
10. Autoestima Bíblica. Señor, ayúdame a tener una autoestima saludable, basada en la realidad de que son hechura de Dios, creados para buenas obras en Cristo Jesús.
Efesios 2:10 Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas.
11. Fidelidad. Dios, que el amor y la fidelidad nunca se aparten de mi, sino que estén siempre escritas en mi corazón.
Proverbios 3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Átalas a tu cuello, Escríbelas en la tabla de tu corazón;
12. Valor, Padre, ayúdame a ser fuerte y valiente en carácter y acciones.
    Deuteronomio 31:6 Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará.
13. Pureza. Señor, crea en mi un corazón limpio, que se manifieste en mis acciones.
    Salmos 51:10 Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí.
14. Gentileza. Dios, enséñame a ser amable con los demás.
1Tesalonicenses 5:15 Mirad que ninguno pague a otro mal por mal; antes seguid siempre lo bueno unos para con otros, y para con todos.
15. Generosidad. Padre, concédeme un corazón generoso y dispuesto a compartir, para que haga tesoros en el cielo.
1Timoteo 6:18 Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; 19 atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.
16. Pacificadores. Señor, ayúdame a esforzarme siempre por traer paz a cada circunstancia.
Romanos 14:19 Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.
17. Gozo. Dios, lléname del gozo del Espíritu Santo.
1Tesalonicenses 1:6 Y vosotros vinisteis a ser imitadores de nosotros y del Señor, recibiendo la palabra en medio de gran tribulación, con gozo del Espíritu Santo.
18. Perseverancia. Señor, enséñame a perseverar en todo lo que haga, para que corra con paciencia la carrera que tengo por delante.
Hebreos 12:1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante,
19. Humildad. Dios, por favor cultiva en mí la habilidad de mostrar una humildad verdadera hacia todos.
Tito 3:2 Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres.
20. Compasión.  Señor, por favor revísteme con la virtud de la compasión.
Colosenses 3:12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
21. Responsabilidad. Padre, concédeme el ser responsable, para aprender a levar la carga que me corresponde.
Gálatas 6:5 porque cada uno llevará su propia carga.
22. Contentamiento. Dios, enséñame el don de tener contentamiento en cada circunstancia.
Filipenses 4:12 Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. 13 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.
23. Fe. Oro que la fe crezca y se arraigue en mi corazón para que por ella pueda recibir lo que me has prometido.
Lucas 17:5 Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe. 6 Entonces el Señor dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y os obedecería.
24. Corazón servicial. Señor, ayúdame a desarrollar un corazón servicial para que sirva de todo corazón, como sirviendo al Señor.
Efesios 6:7 sirviendo de buena voluntad, como al Señor y no a los hombres
25. Esperanza. Que el Dios de toda esperanza me conceda vivir lleno de esperanza por el poder del Espíritu Santo.
Romanos 15:13 Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo.
26. Disposición y Habilidad para Trabajar. Enséñame, Señor, a valorar el trabajo para que lo haga con todo su corazón, como para el Señor, y no para los hombres.
Colosenses 3:23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;
27. Pasión por Dios. Señor, por favor lléname de un corazón que busca a Dios apasionadamente.
Salmos 63:8 Está mi alma apegada a ti; Tu diestra me ha sostenido.
28. Autodisciplina. Padre, ayúdame a adquirir disciplina para vivir prudentemente, haciendo lo que es correcto y justo.
Proverbios 1:3 Para recibir el consejo de prudencia, Justicia, juicio y equidad;
29. Dedicados a la Oración. Señor, inclina mi corazón a la oración, para que mi vida sea marcada por el Espíritu Santo.
Efesios 6:18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos;
30. Gratitud. Señor, ayúdame a vivir una vida que reboce gratitud, dando gracias
Efesios 5:20 dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Colosenses 2:7 arraigados y sobreedificados en él, y confirmados en la fe, así como habéis sido enseñados, abundando en acciones de gracias.
31. Corazón misionero. Padre, lléname con el deseo de ver tu Gloria manifestada en las naciones.
Salmos 96:3 Proclamad entre las naciones su gloria, En todos los pueblos sus maravillas.
Pr. Marco Barrientos