domingo, 31 de marzo de 2013

BENDECIR Y NO MALDECIR



EL VERDADERO AMOR CRISTIANO

Bendecir y no Maldecir (ROMANOS 12:14)
1.       En Rom 12:1-2, somos llamados a...
a.       Presentar nuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, aceptable a Dios
b.       Ser transformados por la renovación de nuestras mentes
c.        Comprobar (probar, demostrar) cual es la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta

2.       En los estudios anteriores se ha examinado como una vida transformada incluye gracias tales como...
a.       El amor sin fingimiento, que aborrece lo malo – Rom |2:9
b.       El amor a los hermanos con afecto de familia, prefiriéndonos los unos a los otros – Rom 12:10
c.        Sirviendo al Señor diligentemente, fervientes en espíritu – Rom 12:11
d.       Gozosos en la esperanza, sufridos en la tribulación, constantes en la oración – Rom 12:12
e.       Compartiendo para las necesidades de los santos, practicando la hospitalidad hacia los extraños Rom 12:13

3.       Otro indicador de la transformación es como alguien responde al maltrato:
“Bendecir a los que os persiguen; bendecir y no maldigáis.” (Rom 12:14)

I. EL MANDAMIENTO DEFINIDO
A.       BENDECIR...
1.       La palabra griega es Eulogio; como es definida:
a.       Alabar, celebrar con alabanzas
b.       apelar bendiciones
2.       “La palabra bendecir aquí significa hablar bien de o para. No maldecir en contra, o desprestigiar, sino hablar de aquellas cosas que podemos alabar en un enemigo; o si no hay nada que podamos alabar, no decir nada sobre él.”
3.       “En este caso, orar por ellos, desearles el bien”
4.       Encontramos este mandamiento dado por Cristo y por Pedro – Mt 5:44; Luc 6:28; 1 Ped 3:9 Pablo da la exhortación dos veces; tal vez denotando el desafío a esta responsabilidad

 B. NO MALDECIR...
1.        “maldecir, es el pecado de echar maldiciones sobre alguien”
2.       “...Implorar una maldición de Dios para que repose sobre otros; orar para que Dios los destruya.
Aun en un sentido más extenso, significa abusar por medio de palabras de reproche; calumniar; o expresarse uno mismo en una forma violenta, profana, y escandalosa.”
3.       “Cuando él diría, no maldigáis, él quiere decir, no desear el mal a sus enemigos.”
“El que pueda obedecer este precepto es un hombre transformado”.

II. EL MANDAMIENTO DESCRITO
A.       EN EL CARÁCTER DE JOB...
1.       Descrito por Dios como “un varón perfecto y recto” – Job 1:8
2.       Que era declarado inocente en relación a maldecir a otros – ver Job 31:29-30

B.       EN LA CRUCIFIXIÓN DE JESÚS...
1.       Cuando fue colgado en la cruz, orando por aquellos que Lo crucificaron – Luc 23:34
2.       Sin embargo fue el objeto de abusos, ofensas y blasfemia – Luc 23:35-39; ver 1 Ped 2:23

C.      EN LA CONDUCTA DE LOS CRISTIANOS...
1.       Así como Esteban, cuando estaba siendo apedreado – Hech 7:60
2.       Así como Pablo y los apóstoles, de quienes se abusó con frecuencia – 1 Cor 4:12

[Así que mientras el mandamiento podría ser difícil, sabemos que es posible obedecer. ¿Por qué y cómo, entonces, debemos buscar llevarlo a cabo...?]

III. EL MANDAMIENTO PUESTO AL FRENTE
A. ES NUESTRO LLAMADO...
1. Hemos sido llamados:
a. Para seguir los pasos de Jesús – 1 Ped 2:21-23
b. Para bendecir, para que heredemos una bendición – 1 Ped 3:9
2. Hemos sido llamados:
a. Para ser participante de la “naturaleza divina” – 2 Ped 1:2-4
b. Para ser hijos de nuestro Padre en los cielos – Mt 5:44-45
-- Podría ser que la “humana naturaleza” responda al mal con el mal, ¡pero tenemos un llamado más alto!

B. ES NECESARIO...
1. En el trabajo, en la escuela
a. Cuando los patrones o los compañeros de trabajo nos difamen
b. Cuando los compañeros de trabajo hacen burla o nos lastiman de otra manera.
2. En casa
a. Cuando los cónyuges dicen o hacen cosas hirientes el uno al otro
b. Cuando el hermano levanta la rivalidad en su propia mente
3. Con los hermanos – Sant 4:11; 1 Ped 3:8-9
a. Cuando dicen o escriben cosas malas contra nosotros
b. Cuando nos maldicen o mal representan
-- No solo cuando somos perseguidos por la causa de Cristo, ¡sino dondequiera que seamos maltratados por otros!

domingo, 24 de marzo de 2013

NO TODOS SERAN SALVOS



NO TODOS SERAN SALVOS
MATEO 13:1-9
INTRODUCCION: En el pasaje que leemos encontramos la parábola del sembrador, y podemos apreciar que el sembrador esparce mucha semilla, pero que en realidad muy poca da fruto, y la razón es: no es culpa del sembrador, tampoco de la semilla, menos de las aves, el sol, los espinos. Veamos de quien es la culpa.

1.       JUNTO AL CAMINO Vs 4
En el Vs. 19, el Señor mismo aclara cual es el tipo de persona que es considerada junto al camino: Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende, viene el malo, y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es el que fue sembrado junto al camino. Las aves la comieron.

2.       PEDREGALES Vs. 5
En el vs. 20 Y el que fue sembrado en pedregales, éste es el que oye la palabra, y al momento la recibe con gozo; 21 pero no tiene raíz en sí, sino que es de corta duración, pues al venir la aflicción o la persecución por causa de la palabra, luego tropieza. Pero salido el sol, se quemó y porque  tenía raíz, se secó.

3.       ENTRE ESPINOS Vs. 7
En el Vs. 22 El que fue sembrado entre espinos, éste es el que oye la palabra, pero el afán de este siglo y el engaño de las riquezas ahogan la palabra, y se hace infructuosa. y los espinos crecieron, y la ahogaron.

4.       BUENA TIERRA Vs. 8
En el  Vs. 23 Mas el que fue sembrado en buena tierra, éste es el que oye y entiende la palabra, y da fruto; y produce a ciento, a sesenta, y a treinta por uno. y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno. 9 El que tiene oídos para oír, oiga.

CONCLUSION: Hoy encontramos muchísima gente en la cual la semilla ha sido sembrada, y encontramos en las iglesias a mucha gente que hace el intento de buscar a Dios, pero también quieren agradar al mundo, viviendo para sus propios intereses, disfrutando de los placeres, encontramos a pastores, a los cuales no les preocupa la salvación de las almas, sino en tener iglesias muy grandes que reporten muchísimos dividendos, y el evangelio de salvación de Jesucristo? Ah, bien gracias.

sábado, 16 de marzo de 2013

EL MINISTERIO DEL ESPIRITU SANTO



EL MINISTERIO DEL ESPIRITU SANTO
2 Cor. 3:3-18
INTRODUCCIÓN: Uno de los temas de mayor relevancia en estos últimos tiempos es, el  Espíritu Santo. Sin embargo, pensamos del Espíritu Santo sólo como una manifestación de poder en lo milagroso, y no como una Persona con múltiples facetas que ha beneficiado a la iglesia de Dios con los diversos ministerios del Espíritu.
Pero todo creyente necesita saber de los ministerios del Espíritu Santo, para ver todos los beneficios que todo cristiano puede experimentar en su vida. Es lamentable que muchos cristianos le atribuyen al Espíritu Santo sólo el de hacer “milagros” o el de “otorgar dones” y se olvidan o desconocen otros ministerios del Espíritu.
El poder del Espíritu Santo se puede ver también en las acciones de su voluntad, cuando dirige las actividades de los que sirven a Dios. Por ejemplo, una muestra de su poder se puede ver cuando:       
·         Prohibió a Pablo predicar en Asia (Hch. 16:6-11)
·         Predicamos el evangelio (1 Te. 1:4-5)
·         Practicamos la vida cristiana (2 Ti. 1:7; Gál. 5:16; Ef. 3:17; 5:18)
El Espíritu es idéntico en Sus Pensamientos. Es el Espíritu que obra en conformidad a la Palabra de Dios (Jn. 16:12-15; 2 P. 1: 20-21; Ro. 8:27; 1 Co. 2:10, 11-13). Podemos decir que es el Espíritu que:
·         Regenera al Pecador (Tit. 3:4-5)
·         Redarguye de pecado (Jn. 16:8-9)
·         Recuerda todas las cosas (Jn. 14:26)
·         Revela los misterios de Cristo (Ef. 3:3-6)
Es el Espíritu que posee Personalidad y esto implica que el Espíritu tiene:
·            Intelecto. (1 Co.2:10-11,13; Ef. 1:17; Ro.8:27; Is. 11:2)
·            Emociones.(Ef. 4:30; Ro. 15:30)
·            Voluntad. (1 Co. 12:11; 16:6-11)
El Espíritu Santo iba a estar en y con los discípulos con el propósito y el ministerio de ayudarles en todas las esfera de la vida. Pero, cuáles son esos ministerios del Espíritu?      
Cómo nos ayuda el Espíritu Santo hoy?
   I. Su Ignorancia: (Jn. 16:12-13; 14:26)
A.  Impartiendo Conocimiento.
La gran mayoría de los discípulos fueron ignorantes, hombres sin letra que nunca habían pasado por una académica rabínica. Por tal motivo, Cristo nunca sobrecargó a ellos con enseñanzas que no podían entender, pero el Espíritu Santo les ayudaría en esa ignorancia para que tengan un Conocimiento pleno de todas las cosas que pertenecen a Cristo y a Su obra, a las promesas dada a ellos y a todo lo concerniente al futuro.
II.  Su Interpretación: de las Escrituras: (Jn. 12:16; 14:26; 16:15)
B. Impartiendo Comprensión.
Una de las cosas que a los discípulos más les contó entender, fue el hecho de que el Mesías prometido tenga que morir. En Lucas 24:25 Cristo les llamó: “insensatos” o falto de entendimiento. Pero el v. 45 de Lucas dice: Entonces les abrió el Entendimiento, para que comprendiesen las Escrituras.
Todo lo que Cristo enseñó a ellos iba a ser aclarado por el ministerio del Espíritu Santo.  Juan 20:9 (1 Co. 2:13). Este ministerio del Espíritu es imprescindible en la hora de estudiar y meditar en la Palabra de Dios.
En estos días de tantos vientos de doctrinas erróneas, necesitamos conocer la diferencia entre la doctrina de Dios y doctrina de demonios. El apóstol Juan escribió al final de sus días: Porque muchos engañadores han salido por el mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Mirad por vosotros mismos, para que no perdáis el fruto de vuestro trabajo, (2 Jn. 7-8).
III. Su Indiferencia: (Jn. 15:26-27
C. Impartiendo Coraje.
El contexto habla de todo lo que ellos iban a enfrentar en el mundo, con toda su hostilidad y aborrecimiento. Pero aún en las pruebas más dura y en la persecución más difícil, ellos tenían que dar testimonio de todo lo que habían visto y oído acerca del Señor y de su obra consumada.
Pero este testimonio no iba a ser en sus fuerzas ni en su osadía, sino en el coraje y en valor dado por el Espíritu Santo. Ellos iban a denunciar pecado y el destino del pecador en el poder del Espíritu Santo obrando en ellos. A propósito de esto el apóstol Pablo nos recuerda que Dios no nos dio Espíritu de cobardía sino de poder (2 Ti. 1:7).
Hoy más que nunca necesitamos del coraje que viene del Espíritu de Dios para denunciar el pecado, para declarar nuestra fe en Cristo en la sociedad, en la escuela, a nuestros amigos y familiares. Necesitamos estar revestido de ese coraje que viene del Espíritu para hacer más eficaz el evangelio de Cristo. Los apóstoles habían orado por más coraje en Hechos 4:23-31. Dice: Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios. (v.31).
IV. Su Intercesión en la oración: (Ro. 8: 26-27) 
D. Impartiendo Convicción.
Una de las cosas más difícil para el creyente es saber cuando estamos pediendo conforme a la voluntad de Dios. Para esto Pablo nos dice: “Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu
 Intercede por nosotros con gemidos indecibles” (v.26).
Tenemos aquí tres cosas que nos ayuda a ver de qué forma el Espíritu cumple su ministerio en la oración a favor del creyente:
·         Su Intercesión.
·         Su Indecibles gemidos.
·         La Intención del Espíritu.
Esa convicción que todos necesitamos tener en la hora de orar a Dios y de pedir las cosas conforme a Su voluntad, viene la ayuda en nuestra debilidad por medio de Su Intercesión, de Su Indecibles gemidos y de la Intención del Espíritu para dictarnos la oración en la manera en que Dios quiere que lo hagamos.
V. Su Inseguridad: (Ro. 8:14-16).
E. Impartiendo Certeza.
 Quizás este es uno de los ministerios más importante del Espíritu Santo en la vida de un creyente. Saber que somos hijos de Dios es el resultado de lo que yo creó y de la certeza que viene del Espíritu de Dios a nuestro espíritu. El Espíritu Santo confirma en la vida misma del creyente la Posición que ocupamos dentro de la familia de Dios y las Posesiones que compartimos como herederos del Padre. Esta certeza viene a la vida de todo aquel que ha confiado en Cristo, y la garantía de esta salvación está sellada por el Espíritu Santo de la promesa, que es la arras de nuestra herencia (Ef. 1:13-14).     
  VI. Su Insensibilidad: hacia el pecado (Ef. 4:30)  
F. Impartiendo Contrición.
Cuando hablamos de “Insensibilidad” estamos hablando de una vida que ha perdido la capacidad susceptible a la Presencia del Espíritu Santo de Dios, y al Pecado en su vida. Estamos hablando cuando pecamos y del pecado no confesado que hace que perdamos toda sensibilidad hacia la Presencia del Espíritu Santo de Dios.